Su cuerpo le hizo saber que era el momento de decir adiós. Al principio intento combatir pero fue inútil. Cuando no le quedaban más fuerzas, simplemente, se dejó ir.
Su cuerpo le hizo saber que era el momento de decir adiós. Al principio intento combatir pero fue inútil. Cuando no le quedaban más fuerzas, simplemente, se dejó ir.