¡Todo lo tengo que hacer yo! Día 100

Día 💯!!!

Madre mía! Con días más inspirados que otros esto marcha viento en popa!

Reconozco que estos días no tengo mucho tiempo. Estoy haciendo mudanza y ¡qué de cosas! Pero bueno, espero dedicarle más tiempo pronto. Gracias por estar ahí y darme fuerzas para continuar 🙂

¡A por el año!

¡Todo lo tengo que hacer yo!

-Desde luego…¡Todo lo tengo que hacer yo! De no ser por mí está empresa se iba a la ruina. ¡Qué pena!

Esa era la cantinela diaria de Manuela. Todos a su alrededor la creían y reforzaban, hasta que Manuela se jubiló.

A pesar de las previsiones de Manuela, la empresa no cayó estrepitosamente, no hizo malos números, no perdió clientes, de hecho, aumentó notablemente su rendimiento, su eficacia y sus ganancias.

Ahora, no había ningún «super trabajador» imprescindible pero ¡trabajaban en equipo!